- La primera de ellas, el abandono al que está siendo sometido esta pequeña parcelita en blanco, que tiene por objetivo dar soporte a algo de negro que pueda ayudarte a evadirte, conocerme, sonreír...o acordarte de mi familia y mi horroros estilo de expresión.
- La segunda de ellas, pero no por ello menos importante, por la entrada anterior.. me quedó flojilla, y de hecho estuve a punto de no publicar; pero qué caray, a lo hecho pecho (lo siento, no siempre soy genial)
Lo mejor de todo es que a pesar de llevar 13 años trabajando aquí, he vuelto y me parece todo nuevo. Yo que puntúo alto (o puntuaba cuando era algo más joven) en eso que los de recursos humanos llaman "apertura a la experiencia" me siento totalmente desubicado, desconcertado... me faltan "mis niñas", y todavía cojo el teléfono diciendo eso de "Departamento Comercial"... ya sé que no voy a borrar los últimos seis años de un plumazo ni mucho menos... seis años de aprendizaje "en vena" no se van en 30 días.. pero ¿será que mi cuerpo -y mi mente- se resisten al cambio?
Son varios los síntomas que apuntan que ésto puedo estar pasando:
2.- Este dominio se extiende, por ende, a la entidad corpórea, entidad que tiene mucho más volumen que la materia gris... vamos, que dar un paso más del previsto exige un esfuerzo soberano
apuntar lso síntomas a la resistencia, estoy de observador... etc.
3.- Y si lo anterior puede apuntar al síndrome post vacacional o posvocacional.. o como se escriba.. y se puede considerar normal... el hecho de que la bandeja de entrada se esté llenando peligrosamente -ojo no es que estén sin contestar, es que todavía no sé cómo voy a archivarlos- y que me parezca a ese tal Doctor Livinstong (supongo), esto es, esté un tanto perdido en la "selva"... no apunta a que esté centrado.
4.- Y claro... ya he comentado que cada vez que suena el teléfono titubeo... esta mañana sin ir más lejos, dije ante una llamada (y menos mal que era interna) lo siguiente, poniendo mi voz de atención al cliente: Departamento comercial?...ehhh.. buenas tardes, digo, buenos días.. ahhh eres tú (esto último al ver la extensión de la llamada).... si es que estoy, como decimos los gallegos, "en las berzas"
Pero bueno, todo esto será un estado transitorio: al fin y al cabo soy yo quien lo decide, le pegaré un "meneo" a las neuronas vacacionales (las de las perversiones, menos.. que hay que tenerlas preparadas, por si...) y a partir de mañana responderé al teléfono con "Alumni, buenos días... ), bueno, no prometo hacerlo bien a la primera.. a lo mejor sigo con "Departamento comercial...este.. Alumni, buenos días"...
La verdad es que sí, he sido afortunado por tener 30 días de descanso, mucho más por poder desarrollar mi profesión, pero, sobre todo, porque esta nueva etapa es "mía", será mi proyecto, al que poco a poco iré dando forma.. sé que en el camino aparecerán baches, piedras... me daré algún leñazo, pero también sé que iré creciendo y que serán más de una y de dos las alegrías que me voy a llevar, porque, yo decido cómo quiero vivirlo .. y quiero hacerlo con una sonrisa.
Y hoy, no sé por qué, me ha venido a la mente una canción que siempre me ha gustado... y que mejor que compartirla con vosotros para cerrar el día? (eso sí, versionada).
6 comentarios:
Me ha encantado la entrada, la canción y todo en general!
No sabes la sana envidia que siento, jaja... hoy día tener un trabajo ya es un privilegio (aunque no debiera serlo), pero tener uno que te satisface y en el que te dan oportunidades para crecer y desarrollarte, eso es un tesoro! Estoy convencida de que si estás ahí es porque te lo has currado y porque lo vales, pero seguro que coincides conmigo en que muchas personas que se han dejado la piel y que lo merecen están en la calle o casi en la calle (y tengo a alguno muy cerca), así que aprovecha la experiencia, aprende y disfruta todo lo que puedas de lo que ese nuevo trabajo pueda darte. Hoy además estoy especialmente sensibilizada con este tema, aunque esto es algo que, si se tercia, ya te contaré en persona.
El tema de la felicidad me parece algo fascinante, es maravilloso cuando ves a alguien que es capaz de disfrutar de las cosas pequeñas, de sobreponerse a los golpes de la vida, de ver el vaso medio lleno pase lo que pase, yo a veces lo consigo (pero pocas, eh?... :D)
Me chirría un poco ese 50% genético, pero si realmente el dato se basa en estudios serios, ¿quien soy yo para ponerlo en duda?... a mi me gusta más pensar que las personas tenemos más que un 40% de poder para vencer a la rutina, al desánimo y a la apatía, creo firmemente en que querer es poder y que cada uno es quien quiere ser, y que con voluntad y con ganas se puede dar un poco por saco al gen 34 o donde sea que se aloje la tristeza.
En cualquier caso me alegro de ver que eres de los afortunados a los que la genética les ha sonreido (o de los que pelean como leones por su 40%, no sé) porque a veces en algunos de tus comentarios creo entrever una gran capacidad para ilusionarte con detalles pequeños (esto lo compartimos) y de ver el mundo con ojos de niño, como quien ve todo por primera vez, y creo que esa enorme virtud te conducirá derechito a la felicidad, felicidad que sin duda mereces, que todos merecemos, así que solo puedo desearte que nunca pierdas la ilusión y que sigas así de feliz, siempre!
guau!!! me has dejado anonadado.. casi sin palabras, y eso es difícil en mi caso, jejeje
Sí reconozco que soy un privilegiado y sí, estoy totalmente contigo de que hay mucha gente que realmente vale, y mucho y que está buscando su oportunidad.. pero bueno, todo se pondrá en su sitio -al final las fuerzas del universo suelen aliarse-
Lo del vaso medio lleno.. a mi a veces me cuesta, y no soy del 50% por ciento optimista.. pero si tengo un 40% de la tarta sobre la que yo tengo la capacidad de decidir, qué caray.. vamos a por ello.
La verad es que he descubierto que son esos momentos los que merecen la pena, y llegar a ellos también... yo decido qué quiero que me afecte y como.. y de verdad, Ondeia (uso el nick por eso de la LOPD, jejeje) sé que se puede aprender.. yo estoy en ello.. y hay personas que son un auténtico reducto de felicidad en medio de gente gris, y mientras haya reducto hay esperanza.
No es fácil, o a mi, al menos, no me lo parece. Hay que dejar lastres, cosas que nos han enseñado.. pero merece la pena.. ojala alcancemos un estado de "flor" permanente!!! -esto irá en otra entrada-
Y tienes razón en una cosa, he recuperado la capacidad de tener ilusiones, he dedicado tiempo a rencontrarme y reconocerme.. aquí donde me ves me había vuelto un tío de los grises, casi soso.. jejeje.. y no merece la pena; y como un niño quiero saber el porqué de las cosas, quiero sorprenderme, quiero que me sorprendan, quiero sorprender y todo aquel que quiera acompañarme en el camino para ser feliz, que se una, siempre será bien recibido!!!!
Pues si has peleado y has dedicado tiempo a 'reencontrarte' como dices, creo que has conseguido algo muy bueno. No eres gris, ni oscuro y si algo no transmites es negatividad, sino todo lo contrario! al menos a mi, que tengo la mala costumbre (jaja!) de fiarme mucho de mis instintos con las personas.
Creo que la búsqueda de uno mismo y una serie de conclusiones que se derivan de ella solo pueden venir con los años, no creo que a los 20 lo hubiésemos conseguido, pienso que es necesario vivir determinadas cosas, pasar por muchos lugares y muchas personas para llegar a determinadas conclusiones y dar importancia a lo que realmente la tiene.
A mi me ha costado años liberarme de, como tu dices, algunos lastres, y ahí están, han quedado atrás y me siento muy libre y muy segura en muchas cosas, que no tanto en otras, porque para bien o para mal espero que me quede mucho camino por recorrer y mucho por aprender.
Últimamente mi batalla es alejarme todo lo que pueda de la negatividad, he desarrollado una especie de detector de 'gente tóxica' (como les llamo yo), y es que hay tanta!!... ¿¿no te pasa que los encuentras por todas las esquinas??.. yo huyo de ellos como de la peste, jaja... quejas, lamentos, intolerancia, crítica constante hacia los demás... hay gente que vive así (para su desgracia y la de los que les rodean) y me cargan TANTÍSIMO! hay que alejarse de ellos y tratar de que no empañen nuestro camino hacia la paz interior y la felicidad que (a nosotros sí) nos aportan los pequeños momentos y las cosas insignificantes de todos los días. Estamos en la misma onda, verdad? :)
y a todo esto me he dado cuenta de que lo de la felicidad era el post anterior! jiji.. se ve que en su momento los leí los dos del tirón, que lerdilla soy, jajaja
Ondeia.. lerdilla tú?? si, si... ya, ya.. ;)
Entiendo perfectamente a qué te refieres con los tóxicos, de hecho a veces -y es espantoso lo que voy a decir- estoy convencido de que hay personas que no saben vivir sin tener algún problema... y si no los hay, se los crean.. lo importante es tener una herida abierta, algo de lo que lamentarse... pero porque han aprendido a vivir así...
También es cierto que me he encontrado con otros tóxicos "a mala leche", auténticos hdp que sólo para posicionarse, para convencerse de que son un referente o darse importancia se preocupan por dos cosas: pisar y, por supuesto, estar en todos los cotarros... jugando con la compra-venta de información de cualquier tipo.
Crecer, mi querida chica-señora con mirada y sonrisa de niña (alma creo que también) implica encontrar el camino, y a veces es duro, pero el ejercicio merece la pena. Estoy seguro de que sólo lo hemos empezado.. pero lo importante es aprender y ello implica desaprender tantas cosas...
Te lo decía hace poco, hemos crecido en la cultura de la culpa, de lo que haces mal, del pero, .. y a veces lo tenemos grabado a fuego.. por eso, es importante aprender desde el optimismo y la esperanza.. no va a evitar que de vez en cuando te desilusiones, te caigas, quieras tirar la toalla... pero aprender es eso, no? si todo sale bien a la primera... de que nos va a servir?
Por eso, creo que los tóxicos número 1 hay que ayudarles.. no.. mostrarles que hay otras formas, y poco a poco.. quien sabe.. puede que se sumen al carro...
yo de los segundo prefiero apartarme, sé que van a intentar entrar en mi senda -para toperdearla-... pero qué vengan.. por ahora no quiero que me canonicen por redimir almas oscuras.. y como alguien me dijo un día "no hay mejor almohada que una buena conciencia".. y yo duermo como un tronco ;)
Ah! Ondeia.. yo también me fío de ese raro sentido, o pálpitos.. o intuición
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